lunes, 16 de septiembre de 2013

UNA CENA CON UN TOQUE DULCE. ROLLITOS DE JAMÓN Y QUESO

¿Cómo? ¿Que no sabéis qué hacer hoy de cena? Muy sencillo, ¿tenéis hojaldre en casa?
Hola, amigos, este verano preparé una cenita en casa que les encantó a todos. Se me ocurrió mezclar una masa dulce con ingredientes salados y la combinación fue fabulosa. Como resultado, obtuve unos rollitos de jamón y queso fundido. Os dejo la receta, que son súper fáciles, rápidos y deliciosos.
Espero que os gusten.







Ingredientes:

  • Una masa de hojaldre.
  • 100 gramos de mantequilla derretida.
  • lonchas de jamón cocido o jamón de pavo.
  • lonchas de queso (a elegir el que más os guste).


Para empezar, extenderemos la masa sobre una superficie plana y limpia, sobre la que habremos esparcido un poquito de harina para evitar que se nos pegue.
Sobre ella, echaremos la mantequilla derretida, esto lo hacemos para que el hojaldre adopte la textura de la masa de un croissant, se quedará blandita y deliciosa.
Tras la mantequilla, pondremos las lonchas de queso y después, las de pavo o jamón cocido.
Una vez hecho esto, enrollaremos el hojaldre como si fuese un brazo de gitano. 
Cortaremos trozos de unos dos o tres centímetros y los colocaremos sobre una bandeja de horno untada de mantequilla, o sobre un papel vegetal de hornear.
Hornearemos durante unos veinte minutos a una temperatura de 180º. Recordad que debéis siempre precalentar el horno durante media hora antes de introducir cualquier alimento.


Espero que os haya gustado esta receta. Es ideal para los peques y triunfaréis seguro con ellos. No dejarán ni las miguitas.
Un beso a todos, dentro de poquito, habrá más entradas.


domingo, 8 de septiembre de 2013

CAFÉ CREMOSO

¿Os apetece un café espumoso?
Hace unos años viajé a Roma para visitar a mi hermana Cristina. Recuerdo que acababa de terminar la carrera y estaba desesperada por vivir un buen verano. A mi padre se le ocurrió mandarme allí para descansar y conocer esa bella ciudad. Mi hermana, como era de esperar, se portó conmigo genial y conocí de primera mano todos los monumentos y museos, HASTA CONOCÍ AL PAPA. :p 
Si os soy sincera, ha sido uno de los mejores viajes que he hecho en mi vida.
Lo que nunca olvidaré es el sabor del café que nos ponían en los bares cuando íbamos a desayunar. Era un sabor tan particular... Hasta en los bares y restaurantes que podríamos considerar como "cutres", servían un café que te transportaba a otra dimensión. Jamás probaré mejores capuccinos que allí.
Pues bien, basándome en esos maravillosos cafés cremosos, di con la clave para prepararlos yo misma. Os advierto que no son lo mismo, ni de lejos, pero al menos, podemos deleitarnos con la espumita que os voy a enseñar a preparar.








Lo primero que necesitáis es un batidor de leche como éste:






Los podéis encontrar en tiendas como Tiger o Ikea, su precio es muy económico, van a pilas pero no gasta mucho. Yo lo tengo dos años, aún no he cambiado la pila y os aseguro que en casa lo usamos bastante.

Para preparar nuestra espuma vamos a llenar un vaso con un poquito de leche, ésta no tiene por qué ser entera, yo siempre uso la semidesnatada.






Este poquito nos servirá para crear suficiente espuma para una taza de café. 
Calentaremos a temperatura máxima en el microondas la leche, durante un minuto y medio. Estad atentos, porque enseguida hervirá y tendréis que sacar el vaso.
Batid la leche muy caliente con el batidor hasta que se empiece a formar la espuma.






Podréis ir viendo cómo duplica su volumen, debido a que la leche ahora es pura crema.






Servid el café en una taza y verted la espuma sobre el mismo. Yo os recomiendo que azucaréis el café antes de poner la crema, ya que si lo hacéis al final, podréis deshacerla.

Para terminar, podéis decorar el café con un poquito de cacao en polvo o de canela. Si acompañáis el café con unas onzas de chocolate, será toda una delicia poder disfrutar de vuestro café al estilo italiano.







Espero que disfrutéis mucho y que no dejéis de barajar la posibilidad de ir a Roma y conocer "la città eterna".









jueves, 5 de septiembre de 2013

CUPCAKES DE CERDITO


Como suele decirse, "del cerdo se aprovechan hasta los andares".
Los cerditos, sobretodo cuando son bebés, son unos animales que me parecen preciosos. Precisamente por esa razón, tanto a mi papá como a mi novio, en ocasiones suelo llamarlos así; "cerditos".
Los dos hombres de mi vida, que son los que he nombrado antes, cumplen años casi al mismo tiempo y cada año me es más difícil superarme con los postres.
Como sabéis, la mejor manera de hacer adornos a las tartas, es usando el fondant. Sé que aún no os he enseñado a hacerlo, ni tampoco a usarlo, pero os encantará cuando empecéis a darle al coco y a imaginar nuevas creaciones.
Como todavía no he preparado la entrada del fondant, os voy a dar una solución más rápida:



Esta cajita que veis aquí, contiene fondant ya preparado, de color blanco, listo para teñir y usa y súper fácil de manejar, aparte, está buenísimo. Podéis encontrar este producto en Carrefour, el precio ronda los 3 Euros, pero es una herramienta de trabajo, que os recomiendo tener en casa.


Primero, para hacer nuestros cerditos, vamos a teñir el fondant con los tintes comestibles de los que, en otras entradas, os he hablado, los de la marca Vahiné, hasta obtener el color deseado. Para ello, os recomiendo colocar un mantelito de látex o plástico sobre la mesa y esparcir azúcar glass, ésta nos ayudará a que cuando amasemos con las manos el fondant, éste no se quede muy pegajoso. Podemos echar tanta azúcar como creamos conveniente.





Como os he comentado ya, añadiremos el tinte, amasaremos con las manos e iremos echando azúcar glass en función de las necesidades. Os vais a pringar mucho, pero es muy divertido. El fondant debe quedarse como una masa lisa y suelta.

Seguidamente, nos ayudaremos de un rodillo para fondant, que es el que veis en la imagen y extenderemos la masa para poder cortarla después y hacer la forma del adorno de nuestras cupcakes.


                                             




Con ayuda de un cortador mediano, haremos círculos que conservaremos. 
Vamos a hacer los morritos:
Para empezar, haremos bolitas que aplastaremos intentando que éstos queden de una forma más o menos ovalada.
Para las orejas, utilicé un molde de letra "A" que tengo. Utilicé el vértice de la letra para que tuviese más o menos la forma de la orejita de un gorrinete.


                                   



Los ojitos serán dos bolitas blancas.
Dibujaremos los detalles del gorrinito con un rotulador de tinta comestible. Este material sí que es caro y sólo lo podemos encontrar en tiendas de repostería especializadas. Os llevarán unos 5 Euros, más o menos.


                     


Para pegar las partes de nuestros cerditos, vamos a usar unas gotitas de agua. tener cuidado de no echar mucha, porque el fondant se deshará y será una ruina.


La receta de las cupcakes ya la tenéis en una entrada anterior, pero esta vez, os voy a dar un truquito para que salga la masa perfecta:




Para evitar que con el peso de la masa de os deforme el molde, lo mejor es meter los moldes de papel dentro de un molde de silicona. Si no tenéis ninguno, podéis hornear las cupcakes poniendo doble el molde de papel, así aguantará más.

Una vez las horneéis, tendréis que cortar la parte de arriba de la cupcake, la que tiene forma de montañita, para que el adorno de fondant quede bonito. Untaréis la cupcake de alguna crema (yo usé vanilla icing, la crema de vainilla de la que ya os he hablado otras veces). Se puede usar también mantequilla o chocolate.
Éste fue el resultado. Bonito, ¿verdad?






Hasta me atreví a forrar de fondant una tarta, que fue la que le hice a mi papá.






Amiguitos, el resultado, cuando se hacen las cosas con el corazón, es siempre precioso. Vuestras familias y amigos van a disfrutar mucho con recetas tan sencillas como éstas.
Si al principio los postres no salen como queríais, no desesperéis, nadie nace sabiendo. El esfuerzo es lo que cuenta.

Os dejo otra versión de cupcake que hice hace tiempo con fondant. Espero que os guste.



Besos de gorrinito para todos.